viernes, 11 de diciembre de 2009

LA DIFICULTAD PARA HABLAR CON NUESTROS PADRES SOBRE CIERTOS TEMAS

Muchas veces nos cuesta más trabajo hablar con nuestros padres sobre unos temas que sobre otros.Por ejemplo, tenemos bastante dificultad para informar a nuestros padres sobre el suspenso de un examen. Esto puede deberse a que sentimos miedo a la posible reacción negativa de ellos; por tanto, no nos atrevemos a comentárselo hasta que no tenemos un buen argumento con el que justificar el insuficiente.

Y es que quizás no nos damos cuenta de que los que no aceptamos el suspenso somos nosotros y por esa razón pensamos que nuestros padres tampoco lo van a aceptar, de ahí nuestro miedo.

A pesar de esta anticipada, y puede que equivocada, suposición que nos hacemos de la reacción de nuestros padres queremos y sabemos que tenemos que comentarles lo sucedido. La razón es que son responsables de nosotros, se preocupan por nosotros y sabemos que todo lo que hagan, lo van a realizar con buena intención, teniendo como objetivo nuestra mejora y progreso.
Hemos de hacer un intento por elevar la confianza hacia nuestros padres (hablar más con ellos, pedir opiniones...),tanto para tratar sobre temas como los estudios, como para conversar sobre otros.
Para ello, debemos pensar de una manera más objetiva y no siempre negativamente.

Además, antes de querer elevar nuestra confianza con los demás, debemos aprender a confiar en nosotros mismos, aceptar nuestros errores (en este caso el suspenso)y asumir nuestros problemas. Tampoco hemos de esperar siempre que sean los demás los que nos den confianza a nosotros, sino también nosotros intentar darles confianza a ellos.

Así podemos conseguir una mejor comunicación tanto con nuestros padres como con el resto de las personas.


1 comentario:

  1. ana me parece que tu redaccion es buenisima enhora buena francisco jose gordon

    ResponderEliminar