En muchas ocasiones no hablamos con los padres de temas como las drogas , el tabaco , el alcohol , las relaciones con los amigos , cuando sacamos malas notas en el colegio, etcétera porque pensamos que nos van a regañar o que no nos van a entender y preferimos no contárselo.
Pero entonces nos quedamos con dudas que a veces no sabemos a quien preguntárselas o , por el contrario, contamos con los amigos que se pueden confundir porque no piensen igual que nosotros o porque no lo saben con seguridad.
Por eso debemos de recurrir a los padres cuando necesitemos informarnos sobre estos temas porque ellos quizás nos lo expliquen mejor, bien porque lo han vivido o por simple experiencia.
Pero puede que ellos no sepan algunas respuestas a nuestras preguntas porque a ellos no los han enseñado a hablar con nosotros, a informarnos de todo lo que tenemos a nuestro alrededor.
De todas formas deberíamos preguntarles sobre el alcohol, el tabaco... porque nos pueden ayudar y además ganamos más confianza y más seguridad y quizás hasta nos sintamos más protegidos.
MARINA PEÑA MILLÁN
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